El pasado mes de noviembre, la Unesco incluyó al fado, el canto popular urbano portugués, en su lista de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad,
todo un orgullo para los ciudadanos lusos, que en 2012 quieren rendir
homenaje a su género musical más conocido en el Festival de la canción
más internacional: el Festival de Eurovisión.
Cada año desde 1964, los portugueses eligen a su candidato para Eurovisión en el Festival da Canção, programa de la Radio y Televisión de Portugal (RTP) que en esta ocasión buscaba una canción claramente inspirada en el ritmo y los sonidos del fado. En la gran final del Festival da Cançao,
celebrada este sábado 10 de marzo, el público y el jurado especializado
decidieron por unanimidad que la representante de Portugal en
Eurovisión 2012 sea Filipa Sousa con la canción "Vida minha", compuesta por Carlo Coeljo y Andrej Babic.
La cantante participará en la segunda semifinal
del Festival de Eurovisión, que se celebrará el 24 de mayo. El
principal objetivo de Filipa Sousa será llegar a la gran final del 26 de
mayo y superar así la modesta participación del pasado año, en la que
el grupo Homens da luta quedó en la penúltima posición de la semifinal.
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